Voy subiendo de dos en dos los peldaños de la escalera, me pesa la ropa, como siempre me esperan mis adoradas reinas, voy quitándome la corbata antes de meter la llave en la cerradura , dejando atrás un sinfín de proyectos e historias interminables...
Creo que empieza a sonar la banda sonora en mi cabeza mientras abro la puerta. Consigo desvestirme de todos los prejuicios que me agarrotan el alma, suelto el pie del acelerador y ahora soy una persona nueva.
Bajo las luces hasta niveles místicamente inconfesables, preparo el ambiente, mientras se aproxima el momento salgo desnudo a dar una vuelta por el deslunado. Voy sorteando por el borde de los tejados entre alambres y viejas antenas hasta llegar a mi destino y poder coger dos rosas rojas prestadas a mi vecina y colocarlas en el jarrón con agua en la mesa.
Bajo las luces hasta niveles místicamente inconfesables, preparo el ambiente, mientras se aproxima el momento salgo desnudo a dar una vuelta por el deslunado. Voy sorteando por el borde de los tejados entre alambres y viejas antenas hasta llegar a mi destino y poder coger dos rosas rojas prestadas a mi vecina y colocarlas en el jarrón con agua en la mesa.
Descorcho una de mis mejores botellas de vino tinto de reserva de Requena, de esas que se guardan para las buenas ocasiones.
Mi corazón se acelera por momentos. Soy infiel por instantes.
No puedo dejar de cantarles al óido:
No puedo dejar de cantarles al óido:
Baby baby baby...
Me encanta hablar con ellas, de todo. Y me escuchan. Sin duda este es nuestro momento: Love's time
Me encanta hablar con ellas, de todo. Y me escuchan. Sin duda este es nuestro momento: Love's time