Poema indispuesto inspirado tras leer una emotiva entrada de Joserra Rodrigo en su fantástico blog Rock and Rodri Land, de donde cojo prestada la frase del título y la canción Hello In There de John Prine banda sonora para cuando lo leas.
Mil gracias Joserra y ojalá siguiéramos todos el ejemplo de lo que comentas en tu entrada del blog.
" Old People Just Grow Lonesome "
Me niego a que nuestros mayores
se conviertan en un mueble de caoba oscura
parte de un salón frío y enorme sin flores
donde apenas entran ya el sol ni la luna
...Con las ventanas siempre entornadas
y se sienten en una silla dirección al horizonte
con la mirada perdida y el alma arrugada
mientras se resignan a que pasen rápidos sus dolores
Me niego a que nuestros mayores
se conviertan en un mueble de caoba oscura
Son eternas autopistas de la soledad sus noches
donde mezclan para dormir viejos recuerdos
con mermelada de lágrimas a falta de colores
en una dura vida pintada en blanco y negro
No se donde empieza mi verdad y acaba el camino
pero si no estas conmigo no hay destino que inventar
páginas en blanco de una historia que contar son testigo
solo te pido que me perdones por no haberte sabido ...
escuchar
Rod Rodriguez
Bienvenidos a mi blog Canciones Poemas Y otras Legumbres donde podréis ver algunas letras de canciones,algunas poesías, algunos poemas indispuestos, relatos cortos, vivencias a corazón abierto, pensamientos en voz alta ahora que no nos escucha nadie, algunas notas, acordes, desacordes afinados, fotografías de la vida misma y otras legumbres
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sábado, 28 de enero de 2012
John Prine - Hello in There
miércoles, 18 de enero de 2012
Como niño con zapatos nuevos
Tras una repleta semana de acontecimientos diversos en todos los frentes y aderezados con su habitual dosis de frenético estrés se acercaba el ocaso de la jornada y su correspondiente respiro fugaz.
No dispuesto a dejarlo pasarlo de puntillas ni mucho menos de lejos en esta ocasión, aparqué el coche, los prejuicios, la sobrecarga que apenas me dejaba ser yo mismo y me perdí en mi oasis particular entre acordes, notas, riffs de guitarras sesenteras, novelas negras, comics y otras legumbres.
Fui navegando con mi habitual torpeza de estos casos convaleciente tras la batalla del dia a dia pero poco a poco siendo aprendiz de superviviente de la vida y desenvolviéndome cual pez en el agua a cada instante que pasaba hasta llegar a encontrarme en mi propio habitat rodeado de una burbuja de proteccion casi de acero y cristal a partes iguales.
De entre todos los caminos recorridos, senderos, atajos, puentes y encruzijadas de repente y sin saber muy bien como había llegado hasta allí y quizás la casualidad me hizo tropezar con este doble CD del gran maestro Elliott Murphy ( www.elliottmurphy.com) grabado en directo en París. Unica pieza y estaba allí frente a mi, el destino me la estaba reservando para mi Alive in París.
Todo el mundo conoce a mister Elliott Murphy, es sin duda una de las figuras de culto mas grandes del rock de todos los tiempos, además de actuar como escritor de relatos cortos, novelista, productor y no se cuantas cosas mas. Dicen que otro de los grandes: el Boss cada vez que va a tocar a París no se puede resistir de invitarle a subir al escenario a tocar con él.
Fue escuchar las primeros acordes del Alive in París y flotar como en una nube con los ojos cerrados. Bien acompañado para la ocasión con Olivier Durand a la guitarra y coros, es para quitarse el sombrero ante la virtuosidad de este pedazo de músico ante las seis cuerdas, flipante en el tema Sonny, cual mago siempre mas veloz los dedos que la vista; con Alan Fatras al cajón y coros y Laurent Pardo al bajo y coros. Grandes temas van cayendo sin duda uno detrás de otro, llegando al sublime Green River uno ya se encuentra flotando en otra galaxia desde la cual la perspectiva es inapreciablemente casi perfecta en sus cinco sentidos.
Y yo solo allí rodeado en mi nube particular empapandome hastas los huesos de puro y buen rock and roll y sintiéndome egoístamente vivo aislado de todo el mundo... como niño con zapatos nuevos.
Rod Rodríguez
No dispuesto a dejarlo pasarlo de puntillas ni mucho menos de lejos en esta ocasión, aparqué el coche, los prejuicios, la sobrecarga que apenas me dejaba ser yo mismo y me perdí en mi oasis particular entre acordes, notas, riffs de guitarras sesenteras, novelas negras, comics y otras legumbres.
Fui navegando con mi habitual torpeza de estos casos convaleciente tras la batalla del dia a dia pero poco a poco siendo aprendiz de superviviente de la vida y desenvolviéndome cual pez en el agua a cada instante que pasaba hasta llegar a encontrarme en mi propio habitat rodeado de una burbuja de proteccion casi de acero y cristal a partes iguales.
De entre todos los caminos recorridos, senderos, atajos, puentes y encruzijadas de repente y sin saber muy bien como había llegado hasta allí y quizás la casualidad me hizo tropezar con este doble CD del gran maestro Elliott Murphy ( www.elliottmurphy.com) grabado en directo en París. Unica pieza y estaba allí frente a mi, el destino me la estaba reservando para mi Alive in París.
Todo el mundo conoce a mister Elliott Murphy, es sin duda una de las figuras de culto mas grandes del rock de todos los tiempos, además de actuar como escritor de relatos cortos, novelista, productor y no se cuantas cosas mas. Dicen que otro de los grandes: el Boss cada vez que va a tocar a París no se puede resistir de invitarle a subir al escenario a tocar con él.
Fue escuchar las primeros acordes del Alive in París y flotar como en una nube con los ojos cerrados. Bien acompañado para la ocasión con Olivier Durand a la guitarra y coros, es para quitarse el sombrero ante la virtuosidad de este pedazo de músico ante las seis cuerdas, flipante en el tema Sonny, cual mago siempre mas veloz los dedos que la vista; con Alan Fatras al cajón y coros y Laurent Pardo al bajo y coros. Grandes temas van cayendo sin duda uno detrás de otro, llegando al sublime Green River uno ya se encuentra flotando en otra galaxia desde la cual la perspectiva es inapreciablemente casi perfecta en sus cinco sentidos.
Y yo solo allí rodeado en mi nube particular empapandome hastas los huesos de puro y buen rock and roll y sintiéndome egoístamente vivo aislado de todo el mundo... como niño con zapatos nuevos.
Rod Rodríguez
sábado, 7 de enero de 2012
Vida a pesar de todo
No hubo dificultades imaginables
sin hallar al final del túnel una luz
No hubo distancias infranqueables
sin un destino al que llegar
No hubo noches cerradas
sin estrellas brillantes como tu
No hubo mares sin playas de arena
donde la espuma no se dejase besar
No hubo silencio a gritos
ni el sinsentido que callan las palabras
No hubo suficientes murallas
que detuviesen los sueños del alma...
y la vida.
( Poema perteneciente al próximo libro:
"Cuando la lluvia solo sabe a miel y poemas" )
Rod Rodríguez
sin hallar al final del túnel una luz
No hubo distancias infranqueables
sin un destino al que llegar
No hubo noches cerradas
sin estrellas brillantes como tu
No hubo mares sin playas de arena
donde la espuma no se dejase besar
No hubo silencio a gritos
ni el sinsentido que callan las palabras
No hubo suficientes murallas
que detuviesen los sueños del alma...
y la vida.
( Poema perteneciente al próximo libro:
"Cuando la lluvia solo sabe a miel y poemas" )
Rod Rodríguez
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